Al Padre le agradó que en él habitara toda plenitud.
El Padre ama al Hijo, y ha puesto en sus manos todas las cosas.-Dios también lo exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre, para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios el Padre.-Poder y señorío, y por encima de todo nombre que se nombra, no sólo en este tiempo, sino también en el venidero.-En él fue creado todo lo que hay en los cielos y en la tierra, todo lo visible y lo invisible; tronos, poderes, principados, o autoridades, todo fue creado por medio de él y para él.
Cristo murió y resucitó: para ser Señor de los vivos y de los muertos.-Y en él, que es la cabeza de toda autoridad y poder, ustedes reciben esa plenitud.-Ciertamente de su plenitud tomamos todos.
Colosenses 1.19; Juan 3.35; Filipenses 2.9, 11; Efesios 1.21; Colosenses 1.16 Romanos 14.9; Colosenses 2.10; Juan 1.16.
Versión: Reina-Valera Contemporánea - 2011
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