viernes, 10 de julio de 2009

EL DOLOR DE UN PASTOR

Es cierto mi Señor, Gloria mía
Que un día lo dijiste...
Mi alma sabría
Lo que es estar triste.
---
Pero Señor ¿acaso eran extraños?
¿fue tan sólo un día?
¿no fueron varios los años
que por ellos me desvivía?
---
Cuántas veces no perdí el sueño
Buscando para mí nada
Sino orando por el más pequeño
Orando por la manada.
---
Mientras otros sonaban campanas
Yo trataba de ser diferente
No gritándolo por las ventanas
Sino amando... calladamente.
---
Dios mío cuánto dolor
¿Por qué me pagan así?
¿Es que no sintieron mi ardor?
O es que tan sólo piensan en sí.
---
Que no fui yo, que fue tu Unción
Ya lo sé mi Cristo, fue en tu Nombre
Pero dime ¿por qué llora mi corazón?
¿Te olvidas que también soy hombre?
---
Tu Espíritu me dice en este día
Hijo mío no fue en vano
Ni lo será jamás mi Señor, Gloria mía
Porque aún está sobre mí... tu mano.
-pastor Pablo Caballero.

0 comentarios: